EL NIÑO CRECÍA Y SE FORTALECÍA LLENO DE GRACIA Y SABIDURÍA DE DIOS
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MEDITAMOS:
LA FAMILIA el gran Proyecto de Dios para la Paz y la fraternidad de toda la sociedad.
una festividad muy antigua en el seno de la Iglesia, los cristianos celebramos hoy la la fiesta de la Sagrada Familia. El Papa León XIII la promovió muchísimo, porque resalta los valores en los que se debe basar la familia.
Jesús como cualquiera de nosotros aprendió el amor y los valores que nos ayudan a crecer como persona viendo como actuaban sus padres. Él se pierde en el templo y sus padres, como haríamos nosotros buscan a su hijo, le recriminan y Él les contesta que se está ocupando de las cosas de su Padre.
Jesús en este pasaje evangélico nos dice que todos somos hermanos y juntos formamos la familia de los hijos de Dios, aunque tengamos nuestra familia biológica.
Pero la familia hoy, no es sólo la familia a la que todos estamos acostumbrados, sino que existen otros tipos de familias, muchas veces cuestionada por los más conservadores.
Desde la familia aprendemos a amar, ser solidarios, respetar y compartir...
PARA VIVIR: La Familia es nuestro verdadero tesoro de nuestra vida. Cuidemos de las familias, de nuestras familias, para hacer cada día más vivo un mundo con corazón donde transmitamos la fe y el amor hecho caricias, detalles, cuidados y perdón. La familia es la gran escuela del corazón y de la vida.
Vayamos a Nazaret; aprendamos de Jesús, María y José:
Que el Corazón de Dios que se encarna en esta familia, nos llene de luz y calor, para ser mejores: en las buenas y en las malas, en la fraternidad para afrontar los problemas. Viviendo el amor en el hogar, con responsabilidad y respeto, buena convivencia; con la fuerza de la confianza de todos sus miembros, viviendo unidos.... en el diálogo como María cuando encuentran a Jesús: -"¿Hijo por qué nos has hecho esto?"-
1. Vuelve a leer o ver el Evangelio de hoy? y comenta con tus padres y catequistas:
- Al cabo de tres días, lo encontraron en el templo sentado en medio de los doctores, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Todos los que le oían estaban sorprendidos de su inteligencia y de sus respuestas. Al verlo, se quedaron perplejos, y su madre le dijo:
–Hijo, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo te hemos buscado angustiados.
El les contestó:
–¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debo ocuparme de los asuntos de mi Padre?
- Reflexiona sobre tu familia: ¿Cómo colaboras para que tu familia sea comunidad de fe, confianza, ayuda mutua, compartir, diálogo y perdón? Observa a lo largo del día en cuantos momentos eres la persona que ayuda a vivir los valores que Jesús quiere para tu familia consanguínea y para la Gran Familia de los Hijos de Dios que formamos todos los Cristianos desde nuestro Bautismo.
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