LECTURAS MISA AQUÍ.Os dejamos el Evangelio Marcos 1, 29-39:
MEDITAMOS:
JESÚS ES EL MEJOR MÉDICO
La gente se agolpaba llevándole todo tipo de enfermos para que los curara.
En la jornada de cada día, Jesús anuncia y actualiza su misión de predicar el Reino de Dios, curaba de todo mal (la enfermedad del cuerpo y la enfermedad del alma) y se retiraba a orar a Dios Padre.
PARA VIVIR:
Jesús en este Evangelio nos dice que sigamos su ejemplo, que seamos cercanos a los que sufren y tienen necesidades para ayudarles y llevarles esperanza. Que cultivemos nuestra fe y nuestra amistad con Dios en la oración a lo largo del día y que hablemos de Jesús para que otras personas lo puedan conocer a través de nosotros.
Querido Jesús,gracias por ser mi amigo
por acompañarme siempre.
Tú nos conoces y nos amas,
sabes que somos débiles
y que a veces perdemos los ánimos.
Te pedimos: nos hagas sensibles,
delicados, generosos ante el dolor
y la enfermedad de otras personas
para que, a través de nosotros,
sepan ellos que Tú los amas. Amén.
ACTIVIDADES:
1. Lee o ve de nuevo el Evangelio. Después comenta con tus padres y catequistas las siguientes cuestiones:
- Contesta: -¿Quién era la mujer que estaba con fiebre y Jesús la sanó? -¿Qué tipo de personas le llevaban a Jesús para que las curara? -¿Por qué Jesús dijo de ir a otros lugares a predicar el Evangelio?
- Jesús: a Jesús lo vamos conociendo a medida que leemos, reflexionamos, compartimos y vivimos su Palabra. No podemos taparnos los ojos y no ver lo que Jesús hacía y que nosotros tenemos que hacer. El nos invita hoy a acercarnos con delicadeza y amabilidad a los demás, a llevar nuestra alegría a quien sufre y está triste. Jesús cura de la fiebre y levanta a la suegra de Pedro. Jesús cura a muchos enfermos y expulsa demonios. Jesús vino a anunciar la Buena Noticia de la salvación, pero no pasa por alto la situación de los que le están escuchando y por eso, junto con el anuncio, sana y cura a los que se le acercan y creen en él. Nosotros, misioneros, tratamos de imitar a Jesús y por eso mismo, si anunciamos el mensaje de Jesús, tenemos que acercarnos al enfermo, al necesitado y ayudarles. Jesús, también, se retira a hacer oración, nosotros, por lo tanto, no podemos descuidar la oración, el encontrarnos con Dios, el asistir a la eucaristía los domingos y recibir los sacramentos. Jesús dijo que tenía que ir a otros lugares a predicar y esto nos hace pensar que nosotros en todos los lugares que estemos nos tenemos que comportar como seguidores de Jesús, anunciándolo con nuestras palabras y actitudes. Hoy, el Evangelio nos ha ofrecido un programa de vida, para los que seguimos a Jesús. Hoy hemos recordado en la Eucaristía que Jesús es LA LUZ DEL MUNDO, nos ilumina y nos guía para que hagamos el Bien, llevando su LUZ a los demás.
- Reflexión: Jesús era sensible con los que sufrían, era cercano con los que pasaban necesidad…, como discípulo debemos imitar sus actitudes y actuar como Él. ¿Eres capaz de ver la necesidad del que tienes a tu lado?, ¿te acercas a ellos y haces algo por ayudarlos o justificas tu indiferencia? ¿Qué haces para imitar la vida de Jesús? El Señor buscaba tiempo para orar, para estar a solas con el Padre. ¿Te esfuerzas por tener cada día un tiempo de oración, dejarte inundar por el amor de Jesús y dejarte transformar por Él? ¿Has logrado realizar en tu vida la síntesis entre oración y acción? ¿La oración te lleva al servicio a los hermanos y la acción te conduce a la intimidad con el Señor? La misión: la gente quería que Jesús solucionara sus penas y enfermedades, pero Él sabía que tenía que anunciar la Buena Nueva del EVANGELIO. ¿Cómo participas en comunicar y anunciar el Evangelio? ¿Cómo colaboras para que el mensaje de Jesús sea conocido y vivido por otras personas?
- En mi vida contemplo y soy reflejo el Evangelio: «Él se acercó, la cogió de la mano…». Deja que Jesús se acerque te tome la mano y te cure. Experimenta la fuerza y la gracia de Dios que te impulsan al servicio. «…la levantó», la puso en pie, le devolvió la dignidad. Así está siempre Jesús: como una mano tendida que nos levanta, como un amigo cercano que nos infunde vida. La mujer curada por Jesús se pone a «servir» a todos. Lo ha aprendido de Jesús. Sus seguidores hemos de vivir acogiéndonos y cuidándonos unos a otros. «…le llevaron todos los enfermos…» ¿Cómo te presentas tú ante Jesús? ¿Cómo necesitado, confiado, amado, atendido en todo momento…? ¿Cómo te presentas en tus actividades y trabajos? ¿Te sientes protagonista o dejas que Jesús actúe por tu medio?
- Me comprometo: Trata de identificarte con la suegra de Pedro que está enferma y con fiebre y analiza cuáles son tus «enfermedades» y tus «fiebres» hoy. Aplícate este pensamiento de Teresa de Jesús: «la oración es un impulso del corazón, una sencilla mirada al cielo, un grito de agradecimiento y de amor en las penas como en las alegrías» A lo largo de esta esta semana, realiza alguna acción concreta para consolar y acompañar a personas que estén sufriendo....
3. Ve el vídeo "Levantar la vida" Después coméntalo con tus padres y catequistas:
4. Realiza el puzzle:
¡CURA TODAS LAS HERIDAS,
JESÚS CONFÍO EN TI!
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