CATEQUESIS ANTO Y JULIA -SANTA MARÍA-: CAMINAR SEDIENTOS BUSCANDO EL AGUA VIVA. III DOMINGO CUARESMA -A

domingo, 12 de marzo de 2023

CAMINAR SEDIENTOS BUSCANDO EL AGUA VIVA. III DOMINGO CUARESMA -A

PRIMERA LECTURA “Danos agua de beber” (Éxodo 17, 3-7)

SALMO: “Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor: «No endurezcáis vuestro corazón»” (Salmo 94)

SEGUNDA LECTURA: “El amor ha sido derramado en nosotros por el Espíritu que se nos ha dado” (Romanos 5, 1-2.5-8)

Lee el Evangelio según San Juan 4, 5-42

También podéis verlo:

MEDITAMOS:

JESÚS, FUENTE DE AGUA VIVA

El agua que sale de la roca y salva al pueblo de la sed es ahora el agua que Jesús nos da. Creer es salvación. Jesús es el agua nueva que apaga la sed más íntima, los deseos más secretos que el corazón siente. La Samaritana se ha encontrado con Jesús. A la samaritana le cambia la mirada su encuentro con Jesús. Algo se ha iluminado para siempre en su historia, en su rostro, en sus ojos.

Cuando nos encontramos con Cristo, pozo que sacia nuestra sed, terminamos transformados. La Samaritana ya no volverá a ser la misma. Su pasado quedó superado, ahora comienza una nueva etapa, en la que se irradia la luz.

PARA LA VIDA: CAMINAR SEDIENTOS BUSCANDO EL AGUA VIVA

Dejemos en este tiempo de Cuaresma espacio para el encuentro con el Señor, de calidad. La oración, la adoración, la contemplación del misterio de Jesús que camina hacia la Cruz, nos pueden ayudar en esta nueva manera de mirar y de estar en el mundo.

Jesús, iba para Galilea
pero le era necesario
pasar por Samaria,
llegó hasta Sicar,
junto a la heredad
que Jacob dejó a José,
llegó al pozo y se sentó

Para luego anunciar, como la samaritana, con Quien nos hemos encontrado.

ORACIÓN:

Gracias Señor Jesús,

por tu presencia en medio de nosotros.

Tu sales a nuestro encuentro.

Te pedimos nos hagas tener sed de Ti,

conocerte, amarte

y anunciarte a los demás. Amén.

Cantamos: "Samaritana"

ACTIVIDADES:

1. Lee o ve de nuevo el Evangelio. Después comenta con tus padres y catequistas las siguientes cuestiones:

La conversación que Jesús tiene con la mujer, que va a por agua al pozo, está llena de delicadeza, acercándose a la situación que está viviendo. No se enfada con ella, sino que la ayuda a cambiar, a que las cosas sean de otra manera, le ofrece caminos para cambiar su vida. Esa debe ser nuestra forma de ayudar a los demás.
¿Has ayudado alguna vez a alguien? Cuenta a todos cómo fue.
Si los cristianos vemos que alguien tiene un problema, ¿Podemos pasar de largo o debemos hacer algo? Piensa en alguien que conozcas y que creas que necesita tu ayuda. Acércate a ella y ayúdala.
Si solo supieras el regalo de Dios. ¿Qué me está ofreciendo Dios en esta historia y en este momento de mi vida? ¿Tengo sed de vida, de Dios? Soy una tierra reseca sin agua, como dice en el Salmo 62.
¿He experimentado alguna vez ser alimentado/a con la palabra y el amor de Dios? ¿Puedo decir con los habitantes del pueblo sobre esta historia: “Creo porque lo que hemos oído personalmente”. ¿Cuál es el agua de vida para mí? Habla con Jesús acerca de esta agua de vida.
El pensamiento de Jesús sentado solo junto al pozo es una invitación a estar con Él. Mientras mira a la mujer me mira a mí: ansía ofrecerme vida; me invita a ver el profundo significado de lo que hago; respeta mi dignidad, pidiéndome que haga lo que pueda por Él.
Cuando Jesús dice “Si tú supieras…” revela su deseo de conducirnos al Dios que todo lo sabe, como lo hace Él. Su corazón abierto y generoso es el corazón de Dios, que nos invita a todos a descansar donde somos conocidos y amados, para encontrar una vida perdurable y un refresco duradero.
A lo largo de la semana, vamos a contemplar a Jesús, en el pozo de Sícar, dialogando contigo. Sus palabras "don de Dios", resonando en tu interior. Repite en tu corazón: "Señor, dame de beber".....déjate inundar del amor de Dios.